El ruido de los truenos me hace olvidar de todo lo que sucede en este momento, me lleva a otro mundo y el viento que está húmedo me hace sentir una sensación de frío única. Luego vuelvo y aterrizo en el mismo asiento de siempre con las mismas personas y los mismos problemas. Siento que de algún modo me incomodan ciertas personas, sin saber el por qué.
No quiero escuchar palabras ni risas, quiero estar en silencio, sólo escuchando mi respiración. Pareciese que esos momentos de reflexión en grupo no valieran nada al siguientes día,
valen mierda. Y lo peor de todo es que es verdad, que todas esas promesas de grupo, reflexiones, convivencias, son una gastadera de plata, un día mas arruinado, desperdiciado, porque en vez de estar juntas, se van a asolearse, quemando todas sus neuronas.
Pero no creo que las tengan.
Perras, malcriadas, eso son. No respetan la opinión de otros, entonces para que hacerlo con la opinión de ellas, pero lo que más me da rabia es que las demás no son capaces de decirles algo en la cara porque les da miedo, ¿por que son muchas? ¿por que son lo más 'maduro? No hay razón alguna de tenerles miedo, no me importa si me meto en problemas o si los demás me van a odiar incluyendo profesores, no me importa, con tal de dejarlas en su lugar, pero ojalá eso fuera así, pero no.
Acabo de pensar lo que escribí anteriormente, soy una cobarde igual que las demás, sólo queda una cosa, unirme y apuñalarlas en la espalda. No sería capaz de tirar del pelo ni mucho menos pegarles en la cara, primero porque son superficiales y segundo me expulsan (?) En fin, lo único que voy a hacer es: diciendo todo lo contrario a lo que ellas digan.
Punto final.
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